LOS ANÓNIMOS OPINAN

Hay quienes opinan –con todo derecho y libertad- que los comentarios vertidos en este blog son “una mierda” (sic) y aun mas: que la autora –o sea yo-  de este blog “es una mierda” (sic).
En realidad no es la calificación  (o descalificación) utilizada por el lector/a lo que me lleva a escribir este nuevo posteo, es lo que él/ella supone que yo quiero decir al escribir lo que escribo: “este país es una mierda” (sic). A lo cual le digo que esta equivocadísimo/a y espero que su contribución a este bellísimo y vapuleado país sea, al menos, una parte de lo que ha sido la mía. 
El lector/a, que llamare desde ahora ANÓNIMO, me hace reflexionar.
a)      Si mis críticas a determinados sectores sobre hechos concretos, verídicos y comprobables lo motivaron a utilizar su valioso tiempo para destruir en lugar de construir;
b)      si solo pudo utilizar uno de los métodos más repugnantes y cobardes, como es el anonimato, para expresar su pensamiento;
c)      si mi prédica para que mejoremos nuestra administración pública solo pudo generar una opinión tan pobre en la cantidad y calidad de sus expresiones;
d)      si su única recomendación para retrucar mi personalísima opinión es “que me vaya a vivir a otro país” (sic) y
e)      si su pequeño pensaiento le hace sentir que no me voy a otro país porque tal vez tenga miedo de “descubrir que otros países también son una mierda” (sic) o “que me hagan notar que la mierda soy yo”…
si todo eso es lo que lograron despertar mis escritos… la verdad es que más que nunca: “estamosfritosargentinos”.
Son las personas como ANONIMO las que hacen que este país vaya camino a ser lo que él cree que yo pienso que es.
Personas que solo saben de la crítica por la crítica en sí misma, sin el complemento de la opción a mejorar lo criticado.
Personas que tienen como mecanismo de defensa la ofensa para sentirse valientes.
Seres oscuros que carecen del valor para expresar sus pensamientos identificándose y se esconden en el anonimato.
Pero soy optimista, tengo la esperanza que las cosas van a cambiar, que los ANONIMOS irán desapareciendo –como los dinosaurios- y dejaran espacio para las especies de libres pensadores.
No pienso irme del país, estimados ANONIMOS.
Continuaré diciendo lo que pienso de ese mamut anquilosado y convertido en una maquina de impedir, que es la Administración Publica, mal que les pese a los ANONIMOS.
Es sugestivo que quienes se tomaron el tiempo para comentar mis escritos lo han hecho escondidos tras el anonimato…
Mmm, ¿será que tienen miedo o vergüenza de ser reconocidos como parte del sistema que yo critico?
Eso sí, del comentario de ANONIMO rescato algo muy importante: cierra su brillante y original exposición con un “con todo respeto”   (sic).
Me deja más tranquila el respeto que me concede.
Hasta la próxima.

BENEPLÁCITO

BENEPLÁCITO

La verdad que la palabrita suena bonita. Se pronuncia como si estuvieras saboreando una cucharada de dulce de leche. BE NE PLA CI TO.

En vez decir: aprobación, consentimiento, aceptación, permiso y varios sinónimos mas en esta rica lengua castellana que tenemos, dicen: beneplácito. ¿Quiénes? Nuestro queridos Diputados. Porque algo hay que reconocerle a estos señores que legislan para nuestro bienestar (mmm, que mentirosa me levante hoy), bueno no se si legislan para nuestro bienestar, pero legislan. Y en el lenguaje propio de la legislatura, leyendo los proyectos que ya les contare, veo que todos dicen: “expresar beneplácito” por tal o cual acontecimiento.

¿Qué me quieren decir con eso?

Que están aprobando, consintiendo, aceptando, dando permiso, etc., a determinado acto.

Muy bien, si eso es así ¿me pueden explicar por qué carajo tienen que sentir o dar “el beneplácito” a las siguientes situaciones?

        “Expresar beneplácito al cumplirse 201 años de la creación del escudo nacional.” Diputada Dulce Granados. Tramite N° 0281-D-2014.

¿Después de 201 años??  No estamos un poco fuera de tiempo? ¿Y si no le damos el beneplácito que pasa?

      “Expresar beneplácito en el centenario del fallecimiento de Jorge Newbery” Diputado Alberto Emilio Asseff. Tramite N° 0097-D-2014

Yo no veo que debamos expresar beneplácito por la muerte de alguien, por más héroe que haya sido. El pobre partió de este mundo y no creo que nuestro beneplácito le haga mucha gracia. Si el beneplácito es por el homenaje, ¡vaya con la redundancia!

        “Expresar beneplácito por el “Día de la escarapela”. Diputada Dulce Granados. Tramite N° 4017-D-2013.

Y dale Juana (o Dulce) con la canasta… esta señora está un poco reiterativa con los símbolos patrios. ¿No tiene nada más importante que llevar a su trabajo?

Y así puedo seguir hasta el amanecer, esto es solo una muestra, más pequeña que un botón, de este asunto de expresar beneplácito por cada huevada, que da vergüenza ajena.

Como ciudadana que alguna vez puse mi voto para darle mandato a estos señores que deambulan por el Congreso Nacional, me siento defraudada, triste, avergonzada, enojada, harta y podría seguir poniendo adjetivos a mi estado de ánimo, cuando quiero referirme a la actividad desarrollada en ese honorable recinto.

Pero mejor voy a expresar beneplácito porque alguna vez los ciudadanos le hagamos entender a nuestros representantes que no están ahí para boludear.

Hasta el próximo beneplácito.

SIGA EL CORSO,,, OTRO "DÍA DEL"... QUE NO ES EL "DÍA D"

¿Será bueno este Giacocide?

Y, como éramos pocos… pario mi abuela.

“Establecese el 27 de junio como día de descanso para los empleados de la administración pública nacional, en que no se prestaran tareas, asimilándose el mismo a los feriados nacionales a todos los efectos legales.”

Y así de sencillo no mas, dice la Ley 26876 promulgada para refrendar tan profunda y necesaria decisión.

Por lo tanto ahora, además del descanso eterno que los acompaña a diario en sus tareas, tendrán  otro descanso  para celebrar el “Dia del trabajador del estado”.

Aplicada como de costumbre, corrí a buscar información sobre el tema: “¿por qué le habrán puesto el 27 de junio?, ¿será el día del cumpleaños de alguno de los “K”? ¿el día que se inventaron las medialunas?... ya se, es la fecha en que se invento el sello de goma y la almohadilla con tinta roja… no no, nada de eso.

Como buena ciudadana fui a la fuente incuestionable del Boletín Oficial, diario alcahuete si lo hay. Alli esta registrado cada paso y cada peso que los gobiernos de turnos dan y malversan. Algun dia lo van a clausurar porque tienen que publicar cada acto por mas corrupto que sea, por eso me extraña que aun siga existiendo.

Pero volviendo al nuevo feriado que nos acompaña, busque la flamante ley, pero no encontré los considerandos, y me dio mas curiosisdad.

Recurri al maravilloso Google y: ¡bingo!, aca se los cuento: resulta que hace mucho tiempo, había unos señores que trabajaban para el Estado y no eran considerados trabajadores, solamente eran “servidores públicos”, por lo tanto no podían agremiarse, tener un sindicato, o un convenio colectivo. (Parece que hace mucho tiempo la gente pensaba mejor que ahora)

Entonces la O.I.T., un 27 de junio, dicto los Convenios 151 y 157 que establecieron el derecho de los trabajadores estatales a tener un sindicato (con el perdón de la palabra) y a tener sus convenios colectivos.

Esa es la razón para elegir el 27 de junio como “el día del trabajador del estado” y sumar un feriadito más a la larga lista del “ocio argentino”.

¿Qué me cuentan? 

Este país es una fuente inagotable de pelotudeces, un generador de ideas productivas y un crisol de pensadores al pedo.

Por ello hoy quiero recomendar a los que, como yo, sufrimos el flagelo de tratar con la administración pública argentina, algún antídoto para soportar a mis queridos trabajadores del estado, que mas me gustaba el nombre anterior: “servidores públicos” aunque para llamarlos así, en primer término deberían “servir” para algo.

Les recomiendo varias cajas (tantas como organismos públicos deban visitar) de    “GIACOCCIDE VERDE”^(*)

Hasta la próxima.

^(*)  Desparasitante de alto impacto.

I.G.J. INEFICIENCIA o INEFICACIA

I.G.J.

¿INEFICIENCIA o INEFICACIA?

Vamos de mal en peor. Hacen tremendos esfuerzos por cambiar las cosas: todos los días un invento nuevo, “para mejorar la atención” dicen… ¿Qué atención? ¿La que le dan al sufrido usuario? Por favor, no tienen vergüenza.

Son una máquina de hacer pelotudeces. Si se propusieran hacer las cosas tan mal, no lograrían lo que han logrado tratando de mejorar la “atención al usuario”. De verdad lo digo y desafío a quien quiera tener un debate constructivo para poder mostrar cómo funciona ese organismo.

Y no es que yo sea una pesada, que lo único que se hacer es quejarme o criticar. No, no, de ninguna manera. Pongo toda mi mejor y buena voluntad para ver el lado positivo, para poner la otra mejilla, pero es inútil.

Pensando en todo eso, quise adjetivar el tema: ¿Ineficientes o ineficaces? ¿O las dos cosas?

Vamos a meternos en esto de la lengua castellana, tan rica como dicen, tiene estos dos vocablos que muchas veces se consideran sinónimos, pero en realidad no lo son.

No es lo mismo ser  ineficiente que ineficaz. Salvo en casos como el de este querido (porque en el fondo yo lo quiero) organismo en cuestión, que tiene la virtud de lucir los dos adjetivos.

Porque si señores, son INEFICIENTES  e INEFICACES.

Y les voy a explicar el motivo, porque no me gusta hablar sin explicar lo que me lleva a decir ciertas cosas.

EFICIENTE: Se dice de aquel que hace uso racional de los medios con que cuenta para alcanzar un objetivo. Realiza su actividad al menor costo y tiempo sin desperdiciar recursos humanos y materiales. El énfasis esta en los medios para lograr un resultado.

EFICAZ: Sera aquel que pueda cumplir los objetivos propuestos en el tiempo, cantidad y calidad establecidos. El énfasis esta en los resultados

La EFICIENCIA es hacer las cosas correctamente.

La EFICACIA es hacer las cosas correctas.

La EFICIENCIA resuelve los problemas

La EFICACIA logra los objetivos

Como vemos,  parece un juego de palabras, pero no es.

Entonces me pregunto, ¿este organismo es eficiente y eficaz?

Analicemos como funciona (quería poner: “como trabaja”, pero me pareció una palabra muy pesada: t r a b a j a r… mejor digamos funcionar, es más livianito.)

¿Es eficiente?

¿Hace uso racional de los medios con que cuenta para alcanzar un objetivo?

Quien recorra los pisos, ahí no más, sin tratar de mirar más adentro (ahora no se puede entrar porque es una fortaleza infranqueable), pero con ver la cantidad de elementos que se desperdician, expedientes enooooormes, con hojas y hojas que sabe dios donde irán a parar, ya se anuda mi garganta (por no decir mi bolsillo).

Y eso que me refiero a medios y recursos materiales, ni que hablar de los recursos “humanos” (¿humanos?), que también cuestan una fortuna y que se apilan (si, si, leyó bien: se apilan o, si queda mas lindo, se amontonan) por el edificio aparentando cumplir una función.

No es muy difícil hacer el cálculo: si la cantidad de seres humanos que pululan dentro del edificio, incluyendo uniformados que custodian, vaya uno a saber qué cosa, funcionaran (me niego a usar el término trabajaran), los infelices que intentamos hacer un tramite allí no deberíamos esperar tiempos bíblicos para lograrlo.

Resumo: No es eficiente porque No  hace uso racional de los medios con que cuenta para alcanzar un objetivo. No realiza su actividad al menor costo y tiempo sin desperdiciar recursos humanos y materiales. No hace las cosas correctamente y No resuelve problemas. O sea: es INEFICIENTE.

Veamos si es eficaz:

¿Puede cumplir los objetivos propuestos en el tiempo, cantidad y calidad establecidos?

Si una gestión dentro de esos sagrados muros puede llegar a estar meses y hasta años, ya no esta cumpliendo el objetivo en el tiempo establecido, o al menos en un tiempo racional.

Si la cantidad de kamikazes que acudimos dia tras dia, casi a la madrugada, para lograr el tan ansiado “numerito” para ser atendido, no tuviéramos que lidiar con la catarata de observaciones absurdas a nuestros tramites, si el slogan: “mire sus vistas por Internet”, funcionara y si el servicio de “atención” lo prestaran recursos humanos capacitados, que no necesiten levantarse a preguntarle a los “viejos” que es cada cosa, entonces podríamos decir que de alguna manera se cumpliría con la cantidad y calidad de los objetivos.

Resumo: No es eficaz porque No puede cumplir los objetivos en el tiempo lógico, Ni en la cantidad necesaria, Ni con la calidad que se requiere y que debe ofrecer. No hace las cosas correctas y No logra los objetivos.  O sea: es INEFICAZ

Me quedo mas tranquila, puedo adjetivar con los dos, es un organismo ineficiente e ineficaz.

hasta la proxima...